Casi dos semanas han pasado desde que Guillermo Almada presentó su renuncia en Pachuca y el técnico uruguayo siguen sin equipo. En su momento, se especuló que su destino estaba en la Noria, con Cruz Azul, pero con el pasar de los días esa opción se ha diluido.
Desde antes de que la relación entre el técnico y los Tuzos llegara a su fin, se vinculó al charrúa con Chivas y la Máquina. Sin embargo, al final el Rebaño se decantó por Gabriel Milito, mientras que los cementeros apuntan a firmar a Nicolás Larcamón.
En este contexto, de acuerdo con el columnista fue el agente de Almada, Pablo Rivero, quien influyó para que el estratega no llegara a la Noria. Según la fuente mencionada, Cruz Azul estaba dispuesto a pagar cuatro millones de dólares por la cláusula del técnico.
No obstante, el representante quiso llevarse una mayor parte y presentó propuestas más agresivas que no agradaron a los cementeros. Por ello se esfumó la posibilidad de Almada de llegar a Cruz Azul, aunque su relación con Iván Alonso -quien lo llevó a Pachuca- se mantuvo bien.
baf