El Pleno de la Cámara de Diputados avaló el dictamen de la Comisión de Igualdad de Género, en el que se incluyeron las iniciativas de Sofía Carvajal, Yolanda de la Torre, Melissa Vargas y Alan Castellanos.
Este tipo de agresión es muy sutil y duele mucho, principalmente a las mujeres, porque le pega en donde más les duele: en sus hijos.
El Pleno de la Cámara de Diputados aprobó por unanimidad un dictamen de la Comisión de Igualdad, en el que se incluyeron iniciativas de los diputados federales del PRI, Sofía Carvajal, Yolanda de la Torre, Melissa Vargas y Alan Castellanos, el cual otorga un marco normativo a nivel nacional para definir, sancionar y establecer como un delito la violencia vicaria, y con ello, salvaguardar la integridad física y psicológica de las mujeres.
En su proyecto, la legisladora Sofía Carvajal estableció que la violencia vicaria se entenderá como todo acto u omisión cometido en contra de una persona con la cual haya tenido una relación con ella buscando generarle daño.
A su vez, el diputado Alan Castellanos propuso agregar el concepto “violencia vicaria”, e incluir que los modelos de atención, prevención y sanción que establezcan la Federación, las entidades federativas, la Ciudad de México y los municipios son el conjunto de medidas y acciones para proteger a las víctimas de violencia familiar y violencia vicaria.
Mientras que Yolanda de la Torre y Melissa Vargas proponían normar como un tipo de violencia contra la mujer, aquella que, de forma indirecta, lesione o sea susceptible de lastimar la dignidad, integridad o libertad, a partir de ejercer violencia por sustitución con la intención de dañar o incidir en la toma de decisiones de las mujeres en favor del agresor.
Al exponer el posicionamiento de la bancada priista, Melissa Vargas Camacho subrayó que el decreto por el que se reforman diversas disposiciones de la Ley General de Acceso de las Mujeres a una Vida Libre de Violencia, en materia de violencia vicaria, responde a la demanda de los colectivos de mujeres que han exigido que se castigue.
Puntualizó que es una acción que a veces es muy sutil y que duele mucho, principalmente a las mujeres, porque les pega en donde más les duele: en sus hijos. Es ahí, indicó, donde el agresor abusa de esta relación de cercanía para poder hacerle daño, y en donde en ocasiones tiene como cómplices a familiares, abuelos y otras autoridades.
Vargas Camacho anotó que en México existe un registro de 205 casos al respecto, de los cuales, el 80 por ciento de las mujeres fueron separadas de sus hijos de manera inesperada, aun teniendo la guarda y custodia. Además, indicó, la Encuesta Nacional acerca de Violencia Vicaria, en el año 2020, reportó 150 solicitudes de apoyo e intervención por parte de grupos de mujeres.
Matizó que el principal patrón de la violación se registra en la vulneración de los derechos de los menores, aunado a que las autoridades carecieron de un protocolo para poder juzgar con perspectiva de género.
Vargas Camacho destacó que el aval tiene una dedicatoria especial para cientos de mujeres que están viviendo este tipo de agresión y es necesario que sepan que las vemos, escuchamos, oímos y atendemos. Agregó que es importante reconocer que esta ley ya fue aprobada en estados como Yucatán, Chiapas, Zacatecas, Estado de México y Puebla.
baf 15:09