Inmersos en rumores sobre el complicado proceso de separación que están viviendo por todo lo relativo a la custodia de sus dos hijos, Shakira y Gerard Piqué continúan demostrando que Milan y Sasha son su prioridad en estos momentos y, como cualquier expareja con niños en común, toca repartirse las vacaciones para disfrutar al máximo de sus pequeños.
El futbolista del Barça, apasionado del tenis, el que se desplazaba a Londres con sus hijos para presenciar los primeros partidos de Wimbledon donde se le vio muy serio y pendiente de su teléfono móvil en todo momento ahora es el turno de la colombiana, abandonaba Barcelona con Milan y Sasha para poner rumbo a Santander, donde se encuentran en estos momentos.
Más concretamente en Oyambre, famosa por sus olas y un paraíso para los aficionados al surf como Shakira, que ya disfrutó de unos días en la localidad cántabra en septiembre del año pasado con sus hijos y con Piqué, cuando todavía formaban una pareja tan unida como enamorada.