Estados Unidos rebajó este domingo las expectativas de cara a los encuentros que tendrá con Rusia desde el lunes por la crisis en Ucrania y afirmó que no espera ningún “avance relevante”, aunque la Casa Blanca se dice dispuesta a negociar con respecto a misiles y maniobras militares.
En otra entrevista televisada también en la mañana del domingo, Blinken explicó que las áreas a explorar entre ambos países son “medidas que contribuyan a generar confianza y a reducir el riesgo” siempre que se adopten recíprocamente.
Por su parte, Rusia afronta las negociaciones de seguridad con Estados Unidos con una postura inamovible sobre la no injerencia de la OTAN en su patio trasero, especialmente Ucrania, y con la sensación de que sus resultados marcarán las relaciones con Occidente durante los próximos años.