El gobernador de Florida, Ron DeSantis, hizo señalamientos respecto al control de México sobre el paso de personas que buscan entrar a EUA. Esto es parte de una narrativa radical que, lejos de construir soluciones, enturbia la relación bilateral.
Los señalamientos de Ron DeSantis, gobernador de Florida, respecto al control de México sobre el paso de personas que buscan entrar a Estados Unidos, son una narrativa radical que, lejos de construir soluciones, enturbia la relación bilateral, afirmó Ricardo Monreal.
En su cuenta de twitter, el senador destacó que el pasado 12 de mayo, el gobernador republicano de Florida firmó proyectos de ley que prohíben una moneda digital federal centralizada y la vigilancia gubernamental de las finanzas.
En su mensaje, continuó, se refirió a la crisis fronteriza y a la política migratoria del presidente Joe Biden; criticó el fin del Título 42 y agradeció la decisión de un juez federal que bloqueó temporalmente la política de libertad condicional para migrantes, que Washington había puesto en marcha.
El coordinador de los senadores de Morena refirió que el funcionario estadounidense hizo señalamientos respecto a la falta de control de México sobre el paso de personas que buscan entrar a Estados Unidos, y también emitió una opinión negativa en torno a la operación en territorio nacional de los cárteles de las drogas que trafican fentanilo a la Unión Americana.
“Estas aseveraciones son inaceptables por la forma en que el gobernador se refirió a las acciones de política nacional y también por el fondo que las sustenta”, añadió.
Consideró que sus referencias a las estrategias de política nacional para atender el fenómeno migratorio y la delincuencia organizada de narcóticos rebasan la línea de respeto que debe haber entre representantes de Estados soberanos o líderes regionales.
Monreal Ávila consideró que el gobernador de Florida busca la nominación del Partido Republicano para competir en las elecciones presidenciales de 2024, aunque todavía está detrás del expresidente Donald Trump en las encuestas.
“Se ha esforzado en mostrar una visión muy radical del estado de las cosas: en los últimos días firmó leyes sobre la libertad de conciencia de los médicos, en contra de los bonos sustentables, en oposición a la comunidad LGBTTTIQ+, y promulgó legislación antiinmigrante, por mencionar algunas normas recientes”, acusó el legislador zacatecano.
Estamos viendo que el tema migratorio será parte de las campañas políticas hacia los comicios del próximo año, incluso algunas encuestas señalan que ocho de cada 10 republicanos consideran que aumentar las deportaciones es importante.
Explico que la legislación SB 1718 de Florida, firmada esta semana, tiene como justificación combatir los efectos de la inmigración indocumentada generada por las políticas fronterizas del Gobierno federal. La ley obliga a las empresas de ese estado a usar el programa de verificación de empleo E-Verify para identificar a trabajadores indocumentados, e incrementa los recursos públicos para trasladar a personas sin documentos a localidades que gobierna el Partido Demócrata.
El también presidente de la Jucopo dijo que es la normatividad más severa que haya promulgado un estado en esta materia. Activistas que defienden a personas migrantes señalan que ya los trabajadores indocumentados tienen miedo de presentarse a laborar o enviar a sus hijas e hijos a las escuelas. Quienes tengan la posibilidad considerarán marcharse a otro estado, apuntó.
De acuerdo con estimaciones, prosiguió, las personas inmigrantes, con documentos y sin ellos, han aportado decenas de miles de millones de dólares en impuestos. Un cálculo arroja que en 2018 las y los inmigrantes indocumentados en Florida pagaron 1.3 mil millones en tributos federales y 588.3 millones en estatales y locales. Como consumidores, aportan casi 100 mil millones de dólares a la economía del estado, remarcó.
Respecto al asunto del fentanilo, el gobernador vincula la llegada de inmigrantes con el tráfico de aquél, pero la evidencia demuestra que tal aseveración es falsa, pues las y los inmigrantes no trafican drogas, y la mayoría de las personas detenidas por esa actividad son estadounidenses, opinó.
Ricardo Monreal señaló que ciertamente, hay una epidemia de opioides sintéticos en esa nación, y ya cobró la vida de cientos de miles de personas, pero la estrategia para su atención se debe enfocar en los elementos que realmente intervienen en el problema. Con esta visión han avanzado los Gobiernos de las dos naciones concluyó.
smr 12.