por Abelardo Pérez Estrada

@abeperez

Empresario, analista, Expresidente CANACINTRA

Mal empezó este año para la cuarta transformación y es que, en los primeros días, de inmediato perdió la posibilidad de controlar el Tribunal Federal de Justicia Administrativa TFJA, que quedo en manos de Guillermo Valls y la llegada de la ministra Norma Piña para presidir la Suprema Corte de Justicia de la Nación SCJN.

La ministra Piña, seguramente era la última en lista del presidente Andrés Manuel, para ocupar el cargo máximo del poder Judicial, ya que la ministra ha sido la menos cómoda en las votaciones de los temas que le interesan al presidente, además de tener una marcada inclinación a temas que incomodan al presidente, tales como movimientos feministas y protección al medio ambiente.

Cómo ciudadanos, debemos estar alegres y tranquilos, ya que con estos ascensos se logra mantener la autonomía del TFJA y de la SCJN.

Otro dato que seguramente incomoda al presidente es que tanto Guillermo Valls, como Norma Piña, fueron nombrados por el expresidente Peña Nieto

Seguramente la ministra Piña en su calidad de presidenta de la SCJN, estará esperando los embates del presidente Lopez Obrador, quien en un plan B o C estará buscando acotar y diezmar al poder judicial.

Mientras tanto en la UNAM, también tienen un gran reto, y es que este año, antes de que se realice el cambio de rector, deberá dar su dictamen acerca del supuesto plagio de la tesis de titulación de la ministra Esquivel.

Si el fallo de la UNAM determina que, si hubo plagio, se tendrá que leer al menos en 3 ejes:

El Académico, seguramente habrá voces que exploraran si como consecuencia la ministra Esquivel, debiera perder su título de abogada.

El Legal, muchos agraviados por las votaciones de la ministra Esquivel, seguramente buscaran el camino legal para recuperar algo de lo arrebatado por la votación de la ministra.

El Político, la ministra Esquivel debería renunciar a su cargo, quitándole uno de los votos mas cómodos al presidente Lopez Obrador en la SCJN

Esperemos que no quede en duda el prestigio de la UNAM.

Por último, habría que pensar en el fuego amigo porque seguramente la filtración acerca de la tesis de la ministra Esquivel viene de adentro, porque este dato no se lo encuentra un reportero caminando.

¡Es tiempo de los ciudadanos! ¡¡Que no plagiamos!!

smr 12:40