El Barcelona estrenó su andadura en la Champions League 25-26 con un sufrido y trabajado triunfo contra el Newcastle. El ambiente de Saint James’ Park fue tan infernal como esperaba el Barça, pero los culés lograron aislarse. Rashford, que regresaba a Inglaterra tras su salida en verano, fue el auténtico protagonista del cruce: por su juego y por su doblete. Se estrenó como goleador azulgrana en su país, ese del que ha tenido que salir para seguir con su gran progresión. Volvió a casa y salió por la puerta grande.

Rashford lidera la victoria del Barça frente al Newcastle con un doblete.

El atacante regresaba a Inglaterra tras su salida este verano. Dejó la Premier League para reencontrarse con su mejor versión y dejar atrás el ostracismo al que estaba condenado en el United por su cuestionado comportamiento. Y lo está haciendo, como comprobaron en Saint James’ Park. El extremo, que fue titular en el ala izquierda del ataque culé, tuvo un papel protagonista. Desbordó, encaró a los centrales, estuvo atento y rápido en defensa, buscó la meta de Pope, se escabulló bien de Trippier… y fue el goleador. Fue un auténtico incordio para el Newcastle. Se estrenó como realizador culé en su país. Con un doblete. En el minuto 58, remató de forma excepcional un centro de Koundé, y once más tarde superó al meta inglés con un fuerte disparo desde la frontal con la derecha. Una gran forma de reivindicarse y callar bocas. Pero, además, regaló ambición, concentración, intensidad y sacrificio. Por todas estas cualidades, el internacional, que juega cedido en el Barça, tiene encandilado a Flick.

El delantero dio un golpe en la mesa en su regreso a Inglaterra.

Si alguien pensaba que el meta catalán iba a sentir la presión por su estreno en la Champions o por el ambiente de Saint James’ Park pronto despejó cualquier duda. Fue decisivo. Determinante. En el minuto 6 ya salvó un mano a mano con Burnes, aunque la acción fue invalidada. Por si acaso, él exhibió reflejos y sangre fría. En el 24, con el mismo protagonista, en una acción legal, desvió con el pie un disparo a bocajarro. Salvó al Barça. Siempre tranquilo, seguro, bien posicionado. Gordon evitó, con su gol en el 90′, que su debut fuera perfecto. Poco pudo hacer en la acción del atacante inglés. Los jugadores del conjunto de la Premier destacan por su altura, pero el gigante ayer fue Joan García.

Gerard Martín: menudo sufrimiento

El lateral zurdo, titular estas semanas por la baja de Alejandro Balde, sufrió lo indecible esta noche. Elanga no le dio tregua. Se le vio superado. Se esforzó y se mostró disciplinado, pero el sueco pudo con él en la mayoría de las acciones y no fue porque no se desviviera en frenarlo y en anularlo y en cubrir bien su plaza. Fue un examen exigente. Flick apostó en los últimos minutos por Eric García en esa zona del campo.

El Barça no se amilanó pese a la gran atmósfera del estadio del Newcastle. Flick insistió a sus hombres, los días previos del encuentro, que debían estar preparados para el ambiente infernal que al que iban a enfrentarse. Hizo gran hincapié en la necesidad de sobreponerse a ese contexto y entorno adversos, que fue especialmente duro en los minutos finales tras recortar distancias Gordon en el marcador. El técnico realizó un gran trabajo psicológico, y los culés no acusaron la gran tensión del ambiente. Supieron aislarse de la caldera inglesa. También los jóvenes. Como visitante, es un campo incómodo, pero el clima futbolístico que se respira en Saint James’ Park es un lujazo.

GD