Una imagen capturada por la cámara de prevención de riesgos delantera a bordo del Perseverance (bautizada como Hazcam), muestra un nuevo intruso colocado en el interior de la rueda. El rover debe haber golpeado la roca mientras exploraba el cráter Jezero, donde ha estado operando desde que aterrizó en Marte en febrero de 2021.
No se sabe cuándo la roca consiguió subirse al rover, pero como desvela CNET, parece que ha estado allí desde por lo menos el 6 de febrero de 2021.
La roca parece ser tan solo un ligero inconveniente cosmético y no en un impedimento real para el rover. O al menos eso parece. Escribí al Jet Propulsion Laboratory de la NASA para confirmar que esta pequeña roca no representa un problema actualmente y actualizaré este artículo si recibo respuesta.