Con su venia, señor presidente. Quiero poner en contexto por qué es tan importante lo que hoy está por aprobarse en esta Cámara y qué debería interesarte a ti, mexicana, mexicano, pues la historia nos ha demostrado una y otra vez que cuando los militares asumen funciones de policías, el resultado es un aumento en las violaciones de los derechos humanos y la represión se vuelve un blanco fácil, no lo digo yo. Según datos de la propia Comisión Nacional de Derechos Humanos, de 2020 a la fecha se ha dado un incremento en el número de quejas, siendo estas más de mil 785 violaciones graves a los derechos fundamentales.
Hoy vengo a hablar de las letras chiquitas, el truco, la trampa, el engaño detrás de esta reforma y al tiempo. Dentro de sus argumentos te dice que ante la ineficiencia y desconfianza y corrupción en las autoridades policíacas, la reforma es la respuesta, que ante la necesidad de hacer frente a la delincuencia, la reforma es la solución, que ante la necesidad de hacer frente a la estrategia fallida de seguridad, la reforma es la salvación.
Hoy les quiero compartir qué dicen las letras chiquitas de esta reforma, que la militarización no es una solución para combatir la inseguridad, respeto a los derechos humanos, fortaleciendo a nuestras policías municipales y estatales, capacitaciones adecuadas y con uso de inteligencia y metodología de investigación, así como aportaciones reales a los diferentes fondos para la seguridad pública, como lo son el FORTASEG.
Se necesitan mecanismos de control y supervisión que aseguren que las fuerzas de seguridad actúen dentro del marco legal, abonando a la rendición de cuentas y fomentando la confianza de la ciudadanía en las instituciones de seguridad. Actúen dentro del marco legal, abonando a la rendición de cuentas y fomentando la confianza de la ciudadanía en las instituciones de seguridad.
Aprovecho esta tribuna para expresar mi más alta admiración y reconocimiento que merecen nuestras Fuerzas Armadas, pero tal como en su origen fueron creadas para la defensa de la soberanía nacional y la protección de nuestro país ante amenazas externas, cumpliendo su deber con disciplina, valor y compromiso , por ello presento dos reservas a este dictamen, ya que considero fundamental corregir las deficiencias de esta reforma, que tienen como objetivo asegurar que las funciones de la Guardia Nacional permanezcan bajo un mando civil, respetando así el marco constitucional que garantice la separación entre autoridades civiles y militares.
Y ratifico que el voto del Grupo Parlamentario del PRI es en contra de esta engañosa reforma. ¡Mexicanos al grito, despierta! ¡Que viva México!
baf 12:49