La Selección Mexicana de Futbol cambiará de técnico por tercera vez en un ciclo mundialista de 4 años. El problema de esta decisión es que no podemos juzgarla como acertada o errónea porque no sabemos que están buscando los directivos.
Hubo un cambio de timón en la FMF al inicio del ciclo mundialista que originó que fuera destituido Diego Cocca, el técnico nombrado en 2023. Con directivos nuevos, se nombró a Jaime Lozano, técnico joven que debería imponer sangre joven al tricolor.
A Lozano le impusieron que México debería ser semifinalista de la Copa América, un objetivo inalcanzable si se analiza el rendimiento del equipo en los últimos 2 años.Jugaron el torneo y obtuvieron un resultado previsible: eliminados antes de cumplir el objetivo.
El área de comunicación dijo que el resultado era positivo porque habían EMPODERADO a jugadores jóvenes (lo que sea que signifique eso), y la dirección deportiva ratificó el trabajo del técnico.
Y como sucede siempre en el futbol, cada vez que un técnico recibe un espaldarazo, es destituido. Se dice que a Jaime le ofrecieron un descenso en su jerarquía, ofreciéndole que continuara como auxiliar y que traerían un nuevo técnico. En mi pueblo eso se llama “no te corro, pero pongo las condiciones para que renuncies”. Y renunció.
Cuando llegó esta nueva directiva de la FMF ofreció muchos cambios. Y el único cambio visible es el cambio de técnico. Llevan 2 en 2 años. Pero eso sí. Bien EMPODERADOS.
CCC 09:57