Tras el fracaso mundialista de la Selección Mexicana, el mandamás de la Federación Mexicana de Futbol, Yon de Luisa, anunció cambios en el balompié nacional: Regresaría el ascenso y descenso, reducirían el número de extranjeros, trabajarían con una mejor estructura para potenciar las divisiones menores, se acabaría la multipropiedad, entre varias acciones. En otras palabras, factores que la prensa y la afición llevan pidiendo por muchos años.
Ni agua va dijeron, cuando la estructura de la Federación cambió. Se fue Yon de Luisa, llegó Juan Carlos “La Bomba” Rodríguez al timón de la FMF, y se volvieron a anunciar cambios. ¿Cuáles? Más o menos los mismos que en la administración anterior. Además cambiaron de entrenador, de cuerpo técnico y de ejecutivos. ¿Y que creen? No ha cambiado absolutamente nada en el panorama futbolístico. Y lo peor, no se ve para cuando cambie.
Sigue la multipropiedad, sigue el gran número de extranjeros, siguen los equipos de la Liga MX sin el riesgo de descender, sigue la división de ascenso sin posibilidad de valorizarse y sin premio al buen trabajo.
En la cancha sigue lo mismo. La Selección es una copia de la del entrenador anterior: mismos jugadores, mismo rendimiento, mismos resultados.
En 2 años disputaremos una nueva Copa del Mundo, y el panorama no pinta nada bien. No pinta bien porque no hay un nuevo jugador que nos ilusione, no hay un equipo que trabaje diferente, y no hay directivos que propongan una solución al mal del futbol azteca.
Dice mi amigo Salvador González que los futboleros vivimos de una ilusión, y sí. Nuestro futbol es un castillo de arena.
CCC 10:49