La Agencia Espacial Europea (ESA) ha captado la mayor erupción de prominencia solar jamás observada en una sola imagen junto con el disco solar completo.
El evento se extendió millones de kilómetros en el espacio, pero la ESA aclaró que la eyección de masa coronal no se dirige hacia la Tierra.
Asimismo, indica que las sondas espaciales no dedicadas a la ciencia solar sintieron la explosión, como la BepiColombo, una misión conjunta entre la ESA y la Agencia Japonesa de Exploración Aeroespacial (JAXA) que detectó un aumento masivo en las lecturas de electrones, protones e iones pesados con su monitor de radiación.
“Aunque este evento no envió una ráfaga de partículas mortales hacia la Tierra, es un recordatorio importante de la naturaleza impredecible del Sol y la importancia de comprender y monitorear su comportamiento”, reza el texto.
En este sentido, señala que Vigil, la futura misión de la ESA dedicada a la meterología espacial, proporcionará vistas únicas de eventos de esta naturaleza con el objetivo de “proteger mejor nuestro planeta de los estallidos violentos del Sol”.