Un derrame de petróleo en en el mar de Ventanilla, en la provincia del Callao, pintó las playas de Perú de negro. El derrame se registró durante el proceso de descarga de crudo del buque Mare Dorium de la Refinería La Pampilla, tras el fuerte oleaje que llegó como consecuencia de la erupción volcánica submarina cerca de Tonga.
En un comunicado indicaron que la empresa, operada por Repsol, activó “inmediatamente” los protocolos de seguridad y que sus brigadas lograron controlar el incidente.