La Comisión Estatal de los Derechos Humanos (CEDH) en Michoacán, reitera su llamado para que las autoridades correspondientes atiendan a las personas que son desplazadas por la violencia en sus regiones, para que se les brinden todas las garantías y el respeto a sus derechos humanos.
El encargado del Despacho de la Presidencia, Uble Mejía Mora, instruyó a la Visitaduría Regional de Apatzingán a mantenerse atentos para brindar los servicios de la institución, desde la competencia que la ley le otorga, a las personas desplazadas en el municipio de Coalcomán.
Esta CEDH tuvo conocimiento de los hechos, derivado de un oficio girado por el presidente municipal de Coalcomán, José Antonio Morales Arteaga, quien informó a este organismo del desplazamiento de personas a consecuencia de la violencia suscitada en la región.
Ante estos hechos el organismo reitera su exhorto a las autoridades de los tres niveles de gobierno para que se establezcan los mecanismos para la atención y solución a los conflictos que originan la violencia; pero además para que se garanticen los derechos a la atención, la protección, el albergue; y se cubran las necesidades elementales a las personas desplazadas por la violencia.
Este organismo indica que el desplazamiento de personas es una violación a los derechos humanos y se traduce en vulneración al derecho a la vida, la integridad, la libertad personal, la seguridad pública y al libre tránsito; pero además conlleva violación a otros derechos como a la propiedad privada y al domicilio, cuando están implícitos la destrucción o el abandono de las tierras, propiedades y viviendas de los afectados.
Las autoridades son las responsables de garantizar a las personas desplazadas el derecho a la salud, la educación, la alimentación, la vivienda y empleo, en tanto no existan las condiciones para que puedan regresar a sus hogares.
Este organismo reitera su compromiso para coadyuvar en el respeto a los derechos humanos de la población.