Hace unos días el triunvirato que se apodero del PRI-PAN-PRD, dio el banderazo de salida a los juegos del hambre de la oposición, para encontrar a ese responsable que se enfrentará al coordinador, ambos en la línea de simulación, en la búsqueda de la presidencia de la República para el 2024, y tristemente recalco, en búsqueda de la presidencia, no de la representación de los mexicanos.

Tal parece que será, tal como lo hemos dicho, donde el principal cáncer de la oposición, me refiero a Alito, Marko y Zambrano, entendieron que lo que la ciudadanía exige es un frente ciudadano y que hoy, desoyeron ese grito desesperado que en 2018 por castigo se fue hacia Morena, abandonándolos.

De los 14 aspirantes a responsables, vemos un refrito de candidatos, que ahora si creen que pueden, pero que en su momento no pudieron, todos ellos ligados a un pasado, que el presidente López Obrador, se ha encargado todas las mañaneras de recordarnos, cuanto se han llevado y cuanto no han hecho, todos manchados o por lo menos salpicados, de alguna forma por un pasado que los mexicanos en 2018 dijimos que no queríamos.

Claro está, que no funciono del todo la decisión del 2018, castigando a los que se creían dueños de México, en algunos casos nos salió peor el remedio, sin embargo, no entienden que corregir, no es regresar al lugar de donde venimos huyendo.

Para el 2024 los ciudadanos queremos llegar con un proceso ciudadanizado, donde el vehículo sean los partidos políticos y no al revés, parece que no han entendido los dirigentes lo que los ciudadanos rechazamos, queremos un proceso ciudadanizado para encontrar un candidato que realmente nos represente, no el representante que ellos buscan.

Con sus decisiones partidistas, lograron que se disolviera el Consejo Electoral, que buscaba ciudadanizar el proceso de selección, ayudando a buscar al mejor representante, no al que más firmas consiga.

Porque claro está, que no permitirán la participación ciudadana en el proceso de selección, al dar una semana para iniciar y organizar un proceso, nos habla de qué tendrá más oportunidad al que sepa movilizar y no al que tenga un plan real sacar adelante México.

México no necesita un movilizador, necesitamos a alguien que tenga la experiencia, pero sobre todo la pulcritud y honestidad en su carrera para poder dirigir este gran país y no seguir simulando.

El piso parejo, no se pide nada más en Morena, el piso parejo lo pedimos los ciudadanos.

¡Es tiempo de los ciudadanos!, que no aceptamos simulaciones.

POSDATA:

¿Quién le hace más daño a México?

baf 17:58