Los genetistas evolutivos Yan Wong y Anthony Wohns, de la Universidad de Oxford y el Instituto de Tecnología de Massachusetts, han creado un impresionante árbol genealógico que muestra en detalle dónde y cómo vivieron las poblaciones humanas.
De hecho, no se trata de un árbol, sino de un conjunto de árboles que contribuyen a rastrear toda nuestra ascendencia y muestran cómo están vinculadas las secuencias genéticas de todos los humanos.
El autor del estudio subraya que este método también se podría aplicar a cualquier otro ser vivo, desde bacterias hasta orangutanes. Podría ser especialmente beneficioso para la medicina, pues es capaz de “separar las verdaderas asociaciones entre las regiones genéticas y las enfermedades de las conexiones espurias que surgen de nuestra historia ancestral compartida”.
Durante el estudio, el equipo de Wong y Wohns utilizó el denominado método de registro no paramétrico para recopilar más de 3.600 secuencias individuales de 215 poblaciones y alrededor de 70.000 generaciones. Las muestras más antiguas utilizadas en el estudio datan de hace 100.000 años. Según explica Wong, logró “reconstruir los genomas de nuestros antepasados y usarlos para formar una vasta red de relaciones”. De esta manera, pudo determinar dónde y cuándo vivieron.
El insólito mapa genealógico muestra cómo personas de distintos rincones del planeta se relacionan entre sí y provienen de ancestros comunes y hasta explica algunos eventos clave en la historia de la humanidad, como las migraciones desde el continente africano.Los investigadores sugieren que los ancestros más antiguos de los humanos modernos fueron “probablemente” los Homo erectus, los homínidos extintos que habitaron en la Tierra hace entre 1,9 millones y 117.000 años a.C.
Ahora los autores del estudio tienen previsto crear un árbol incluso más complejo mediante los datos genéticos disponibles que explique toda la variación genética humana.