El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, advirtió que en las negociaciones sobre el conflicto con Rusia no hay nada seguro hasta que él mismo dé su visto bueno, antes de recibir al mandatario ucranio, Volodymir Zelensky, mañana, en Florida.
Éste presentó una nueva versión del acuerdo elaborado por Washington y generó el rechazo de Moscú, que acusó a Kiev de “torpedear” las conversaciones.
“Zelenski no tiene nada hasta que yo lo apruebe”, declaró Trump al medio estadunidense Politico. “Veremos con qué llega”, afirmó y agregó: “Creo que saldrá bien. Creo que irá bien con (el presidente ruso) Putin”.
Afirmó también que espera hablar “pronto” con éste.
Se espera que Zelensky viaje el domingo hasta la residencia de Trump en Mar-a-Lago, donde Trump pasa la Navidad y el fin de año.
El mandatario ucranio buscará discutir la cuestión territorial, asunto espinoso de la negociación para poner fin al conflicto con Rusia.
La reunión se dará después de que Zelensky revelara detalles de la versión más reciente del plan de paz de Estados Unidos, revisado tras las conversaciones con Ucrania.
Este nuevo documento, de 20 puntos, propone un congelamiento del frente sin ofrecer una solución inmediata a las cuestiones territoriales y abandona dos demandas clave de Moscú: la retirada de las tropas de Kiev de la región de Donbás y un compromiso jurídicamente vinculante de Ucrania para no entrar en la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN). Esa fue la declaración más clara de Zelensky sobre la posibilidad de concesiones territoriales, como parte de un plan más aceptable para su país frente a la propuesta inicial de 28 puntos presentada por la Casa Blanca el mes pasado, que se ajustaba a muchas de las principales exigencias del Kremlin.
Parte del proyecto incluye una serie de acuerdos bilaterales separados entre Estados Unidos y Ucrania sobre garantías de seguridad, reconstrucción y economía.
“Discutiremos estos documentos, las garantías de seguridad”, afirmó Zelensky acerca del próximo encuentro en territorio estadunidense.
“En cuanto a los temas sensibles, abordaremos el Donbás y la central nuclear de Zaporiyia, y sin duda abordaremos otros asuntos”, añadió.
El nuevo texto es “radicalmente diferente” de lo que Moscú había negociado con Estados Unidos, declaró el viceministro de Relaciones Exteriores ruso, Serguéi Riabkov.
“Sin una resolución adecuada de los problemas que están en el origen de esta crisis, será sencillamente imposible llegar a un acuerdo definitivo”, indicó Riabkov.
JZ
