La realización de operativos simultáneos en 14 municipios del Estado de México, que incluyeron el despliegue de más de 2 mil elementos de las fuerzas armadas, de seguridad pública y personal ministerial, se catearon 52 establecimientos, entre ellos oficinas sindicales, comercios y domicilios en los que La Familia Michoacana materializaba la realización de delitos contra la salud, extorsión y secuestro, y fueron detenidos ocho integrantes identificados como responsables de realizar actividades de “tipo gerencial” para el grupo delictivo.
Durante la conferencia de prensa, en la cual participaron los secretarios de la Defensa Nacional (Defensa), el general Ricardo Trevilla Trejo; de Marina-Armada de México, almirante Raymundo Pedro Morales Ángeles; de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC), Omar García Harfuch; el fiscal del Estado de México, José Luis Cervantes Martínez, y el titular de Seguridad Pública Estatal, Cristóbal Castañeda, se dio a conocer que los miembros de este grupo delictivo provocaban que los precios al público de productos como varilla, cemento, aluminio o alimentos como carne de cerdo, pollo y res se incrementaran hasta 70 por ciento.
El titular de la SSPC, Omar García Harfuch, señaló que desde que se puso en marcha la estrategia en contra de la extorsión, la cual inició el pasado 6 de julio, se han incrementado las operaciones en los estados que concentran la mayor parte de estos delitos, entre ellos los estados de Michoacán, Guerrero, Estado de México.
Durante la llamada Operación Liberación, como se denominó a estas acciones simultáneas en el Estado de México, el objetivo, dijo García Harfuch, era desmantelar a los grupos dedicados al “acaparamiento de mercancías diversas y servicios, con el uso de prácticas extorsivas” en actividades que involucraban animales de granja, cárnicos, materiales de construcción aluminio y varilla, así como otras mercancías”.
Indicó que se volvió “urgente proteger la economía local y la tranquilidad de miles de familias en el Estado de México y detener estas prácticas”, ya que los delincuentes “buscaban controlar las actividades económicas desde el báscula de alimentos hasta materiales de construcción.