La goleada por 3-0 del Chelsea al Barcelona el martes en Stamford Bridge en la UEFA Champions League puso fin a la racha de 53 partidos anotando del club azulgrana.
El Barcelona de Hansi Flick había anotado en todos los partidos desde su derrota por 1-0 ante el Leganés el 15 de diciembre de 2024.
Durante el último año, el Barcelona se mostró a menudo brillante en ataque, pero con una defensa deficiente. Esto se hizo más evidente en la derrota global de 7-6 en semifinales de la Champions League contra el Inter de Milán la temporada pasada.
El martes, contra el Chelsea, el Barça se vio destrozado defensivamente en varias ocasiones, recurriendo a una trampa del fuera de juego que funcionó en ocasiones, pero fue insuficiente para lidiar con la oleada de presión del equipo de Enzo Maresca.
Ferran Torres tuvo una oportunidad de oro para marcar al principio, que desaprovechó al disparar fuera en un mano a mano con Robert Sánchez. Sin embargo, el Chelsea dominó el partido desde el principio.
Ronald Araújo fue expulsado poco antes del descanso con el Chelsea ya 1-0 arriba gracias a un autogol de Joules Koundé. En la segunda parte, Estêvão y Liam Delap marcaron los dos goles restantes.
A los Blues les anularon tres goles durante la noche: uno por mano de Wesley Fofana y dos por fuera de juego.
El Barcelona realizó cinco remates en todo el partido, de los cuales solo dos fueron a portería.
Dado que son los máximos goleadores de LaLiga con 36 goles en 13 partidos y ya han marcado 12 goles en la Champions League esta temporada, su floja actuación contra el Chelsea fue una sorpresa.
El Barça ocupa el segundo puesto en LaLiga y un modesto 15.º en la clasificación de la Champions League, mientras que el Chelsea ascendió al quinto puesto en la Champions League poco después de ascender al segundo puesto en la Premier League.
GD
