Hace unos días Jesus Zambrano, después de unos días de pataleo, finalmente reconoció que finalizó la vida del PRD.
Quizá lo más justo, era haber reconocido que, con su mala dirigencia, enterró a lo que en algún momento fue el estandarte de la izquierda mexicana.
Esa izquierda, de donde salieron grandes luchadores sociales, y también se fueron sumando algunos oportunistas, que únicamente aprovecharon a la izquierda,para seguir cargando su vida al erario.
El final del PRD y la última declaración de Alejandro Moreno, el presidente del PRI, hablando de la refundación del partido político, partiendo del cambio de nombre y cambio de logo, nos manda un mensaje, de que siguen sin entender el desprecio de la ciudadanía, a lo que hoy creen representar, no sólo el partido político, si no las actuales dirigencias, que durante la campaña eligieron aparecer en anuncios, desconociendo los negativos que esto traía consigo.
Platicando con algunos distinguidos PRIISTAS, PANISTAS Y PRDISTAS, coinciden en que los actuales presidentes de los partidos, se han olvidado de la representación popular y en algunos casos cínicamente buscan el beneficio personal y de su círculo cercano, además de con una ambición desmedida, buscan la perpetuidad.
Las pasadas elecciones del 2 de junio, dejaron lecciones entre la derrota, que si se capitaliza puede ser el inicio de una oposición inteligente, ciudadana y real en el país, el resultado nos muestra que al menos hay 16 millones de mexicanos que no están de acuerdo con el resultado del gobierno de AMLO y por eso no eligieron la continuidad y más de 40 millones que no están de acuerdo con la oferta política actual.
Lo anterior, sin duda abre una oportunidad para la creación de un frente ciudadano, no únicamente de oposición, sino de un contrapeso real, que tengan la madurez de apoyar las buenas decisiones del poder ejecutivo que encabezará Claudia Sheinbaum, pero sobre todo de imponerse a las decisiones sin sentido y que no beneficien de ninguna forma al país.
Panoramas hay muchos, de cómo se desempeñará la actual presidenta electa Claudia Sheinbaum, sedesmarcará del presidente López Obrador o dará continuidad ciega a sus proyectos y al rumbo del país.
Creo, que es tiempo de dejar de especular y como ciudadanos por tenemos el derecho y la obligación de exigir a los representantes electos, además con responsabilidad ciudadana apoyar aquellos que genuinamente quieran formar y liderar un contrapeso en este país, porque sólo de esta manera lograremos regular las decisiones que se tomen a nivel federal y estatal, siempre partiendo de que sean por el bien del país, y no por implementar una ideología o por generar una perpetuidad en el poder como prioridad principal del gobernante en turno.
POSDATA:
“…a diferencia de la iniciativa privada, si Alejandro Moreno, Marco Cortez y Jesus Zambrano, fueran presidentes de alguna empresa transnacional, desde hace mucho por resultados y desempeño, ya los hubiéramos despedido….”
¡Es tiempo de los ciudadanos!!! ¡¡¡Que nos debemos reconstruir!!!
CCC 11:25