El legislador precisó que la Profeco ha estimado que la compra de uniformes, calzado, cuadernos y lápices, puede alcanzar los 5 mil pesos por alumno.
El diputado federal Jaime Bueno Zertuche presentó a la Comisión Permanente dos exhortos, uno para impedir el incremento excesivo de los precios de útiles escolares, uniformes, calzado y equipo electrónico; otro, para que la Comisión Nacional de Libros de Texto Gratuitos (Conaliteg) suspenda la distribución de libros de texto editados, por no atender el proceso establecido en la Ley General de Educación.
El integrante del Grupo Parlamentario del PRI argumentó que las familias mexicanas en las próximas semanas vivirán uno de los momentos más desafiantes para su economía con el regreso a clases, donde, subrayó, la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) ha estimado que la compra de útiles puede alcanzar los 5 mil pesos por alumno, aunque se puede incrementar hasta un 40 por ciento si se requiere equipo electrónico como computadoras, impresoras o calculadoras.
Indicó que los tutores corren el riesgo de ser víctimas de malas prácticas de venta por el incremento injustificado de los precios, los productos defectuosos o que no cumplan con las características ofertadas.
Por esta razón, el legislador solicitó a la Profeco llevar a cabo una mayor difusión de la Guía de Regreso a Clases, así como del calendario de las Ferias de Útiles, a fin de que llegue al mayor número de mexicanos posible. También pidió destinar más recursos humanos y materiales para atender las quejas por abusos y malas prácticas en el comercio, con un mayor número de oficinas de protección al consumidor.
Además, llama a reforzar la campaña de la Guía de Regreso a Clases, a través de medios electrónicos y medios tradicionales de comunicación, y no sólo por medio de la página de Internet de la dependencia.
En un segundo Punto de Acuerdo, el diputado Jaime Bueno expuso que los errores, omisiones y adiciones tendenciosas en los libros de texto de educación básica, para el ciclo escolar 2023-2024, provocan un déficit de conocimiento que obliga a parar su distribución. Sostuvo que, formulados de manera unilateral, representan un retroceso educativo y un mal llamado “proceso de revisión” acelerado y superficial.
Puntualizó que en el contenido de los nuevos libros que la Cuarta Transformación se empeña en entregar hay una visión que en nada reflejan a la sociedad, porque, anotó, se ajustan a las necesidades y expectativas personales, sin observar los mandatos legales relativos a los debidos procesos de consulta.
Para solucionarlo, Bueno Zertuche planteó imprimir y distribuir para el próximo ciclo escolar, los libros de texto utilizados en el periodo 2022-2023; solicitar que las conferencias vespertinas para la revisión de los contenidos sean convertidas en reuniones de trabajo con especialistas y representantes de las entidades federativas a fin de revisar y reconfigurar los del ciclo 2024-2025.
Recalcó que la educación, junto con el aprendizaje, tienen una vocación transformadora sin la cual sería imposible construir sociedades pacíficas, justas y sostenibles.
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