– La pandemia, en su primera etapa, trajo afectaciones sin precedentes a los trabajadores del transporte público, debido a la disminución de movilidad de las personas, por las medidas sanitarias establecidas, lo que generó una pérdida de ingresos de más del 50 por ciento en los conductores de combis y taxis.
Un ejemplo claro es el municipio de Sahuayo; en entrevista, el señor Miguel Ángel Rojas, taxista y miembro del Movimiento Antorchista expuso que él y sus compañeros taxistas han sufrido mucho económicamente.
“Nuestro ingreso fuerte era brindar nuestro servicio a trabajadores y estudiantes, pero al momento en que se toman las medidas de distanciamiento y aislamiento, recién llegó la pandemia, el trabajo disminuyó casi 40 por ciento, pues se suspendieron clases, hubo desempleo y no vimos mucho apoyo del gobierno federal para nadie y las cosas hasta ahora no han mejorado mucho”, declaró Don Miguel.
Expuso que estas condiciones de pobreza no las habían vivido en tan poco tiempo como ahora que la Cuarta Transformación llegó al poder, y añadió que con la inflación se complica todavía más pues todo subió, incluyendo la gasolina de la que dependen para poder moverse, a pesar de que el gobierno de López Obrador prometió ayudar a los pobres.
“Cada vez más personas exigimos al gobierno federal que implemente acciones que nos ayuden a mitigar las necesidades que tenemos el pueblo pobre de México, ya va medio sexenio y cada vez estamos más pobres, no hay bienestar, como lo asegura el presidente”, finalizó el chofer.