Un día como hoy, pero en 2001, el mundo fue testigo de uno de los atentados más impactantes de la historia contemporánea. La organización terrorista Al Qaeda llevó a cabo una serie de ataques coordinados contra Estados Unidos, cambiando para siempre la percepción global sobre la seguridad y el terrorismo.
Ese martes por la mañana, dos aviones comerciales fueron secuestrados y estrellados contra las Torres Gemelas del World Trade Center en Nueva York, provocando su colapso en cuestión de horas. Un tercer avión impactó contra el Pentágono, sede del Departamento de Defensa en Washington D.C., mientras que un cuarto aparato se estrelló en Pensilvania tras la resistencia heroica de los pasajeros.
El saldo fue devastador: cerca de 3,000 personas perdieron la vida y miles más resultaron heridas. Las imágenes del humo, el derrumbe de los rascacielos y el caos en Manhattan dieron la vuelta al mundo, convirtiéndose en símbolos de una tragedia global.
Los ataques del 11 de septiembre no solo golpearon a Estados Unidos, sino que redefinieron la política internacional y dieron inicio a una etapa marcada por la “guerra contra el terrorismo”, mayores medidas de seguridad en aeropuertos y una transformación profunda en las relaciones internacionales.
A más de dos décadas, la fecha sigue siendo recordada como un día de duelo, memoria y reflexión sobre la importancia de la paz y la seguridad mundial.
WA