Empleada doméstica latina es asesinada en EU; se equivocó de domicilio

Una empleada doméstica, María Florinda Ríos Pérez, de 32 años, fue asesinada el miércoles, luego de que ella, por error, acudiera a la dirección equivocada y el propietario disparara contra ella el pasado miércoles.

La policía encontró el cuerpo en el porche de su casa en Whitestown, un suburbio de Indianápolis con aproximadamente 10 mil habitantes, según un comunicado de prensa de la policía. Ríos formaba parte de un equipo de limpieza que se había equivocado de domicilio, indica el comunicado.

El esposo de Ríos Pérez, Mauricio Velázquez, declaró a WRTV en Indianápolis que él y su esposa llevaban siete meses trabajando limpiando casas. Velázquez contó que el miércoles por la mañana estaba con ella en la puerta de la casa, pero no se percató de que le habían disparado hasta que ella cayó en sus brazos, sangrando.

En una página de recaudación de fondos, su hermano describió a Ríos Pérez como madre de cuatro hijos. La policía informó el viernes que era originaria de Indianápolis, pero la familia planea enterrarla en Guatemala, según su obituario y la página de recaudación de fondos de su hermano. La agencia Associated Press no pudo contactar directamente a los familiares el viernes.

Las autoridades no han revelado públicamente la identidad del autor del tiroteo. La policía entregó los resultados de su investigación al fiscal del condado de Boone, Kent Eastwood, el viernes por la tarde, pero el fiscal indicó que la decisión de presentar cargos no será fácil.

Según explicó, este caso pone de manifiesto la aplicación de la doctrina del castillo de Indiana. Dichas leyes permiten el uso de la fuerza razonable, incluso la fuerza letal, para impedir lo que se considere una entrada ilegal en la vivienda. Treinta y un estados cuentan con leyes similares, según la Conferencia Nacional de Legislaturas Estatales.

En casos similares en otros lugares, los fiscales han logrado presentar cargos contra personas que abrieron fuego frente a sus casas, incluyendo la declaración de culpabilidad de un hombre de 86 años que disparó a Ralph Yarl después de que el adolescente afroamericano llamara a su puerta por error. En Nueva York, un hombre fue condenado por homicidio en segundo grado por disparar fatalmente a una mujer que se encontraba dentro de un automóvil y que entró por error en su entrada.

Eastwood afirmó que tendrá que estudiar detenidamente las conclusiones de los investigadores para comprender lo sucedido en los momentos previos al tiroteo. Eso implica revisar cada segundo de las grabaciones de las entrevistas a los testigos y las imágenes de las cámaras de seguridad, si la policía se las proporciona, añadió.

“Es necesario comprender todos los detalles para entender qué sucedió y qué es razonable”, dijo Eastwood. “Una de las cosas más difíciles hoy en día es ponerse de acuerdo sobre qué es razonable. Como fiscal, esas son cuestiones con las que tenemos que lidiar”.

GD

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