Desde que pegasen un ‘volantazo’ en la primera curva despidiendo a Ten Hag para contratar a Kasper Hjulmand, el Bayer Leverkusen había recuperado el espíritu ‘invicto’ que portaba Xabi Alonso. Pero, en la visita del PSG al BayArena, el vigente campeón les propició un baño de realidad con una insultante goleada (2-7) que permitió dormir líder a los de Luis Enrique… días después de perder el de la Ligue 1.
Aún sin Joao Neves ni Fabían… pero sí, por fin, con un Ousmane Dembélé que presumía de Balón de Oro en el banquillo del Bay Arena tras más de 45 días ausente. Un mantra, el de las lesiones, que lastró la confección de un once de garantías en un Bayer Leverkusen donde faltaban Quansah, Lucas Vázquez, Tella, Palacios, Tillman y Schick.
Demasiadas modificaciones que no tardaron en hacer aguas con el tanto de Pacho a los cinco minutos tras un saque de esquina. El PSG desordenó sacando en corto y Nuno Mendes, una noche más, sacó a relucir el guante que tiene por pie izquierdo para poner el balón en la cabeza del central ecuatoriano.
Se le acumulaban los problemas al Leverkusen. Tanto para controlar los movimientos entre líneas por parte de Mayulu y Doué… como para sortear la presión del PSG. Sin embargo, en una de sus primeras salidas, Echeverri pujó un balón en el área con Zabarnyi y Gil Manzano acabó señalando penalti por mano del zaguero italiano… que Grimaldo estrelló contra la cepa del poste.
A partir de entonces, el encuentro se convirtió en una montaña rusa donde Mayulu estrelló otro balón contra la madera, Andrich vio la roja por un ‘codazo’ directo al mentón de Doué… y Gil Manzano le enseñó la segunda amarilla a Zabarnyi por cometer otro penalti. Esta vez, por agarrar a un Kofané que le había comido la tostada. Fue Aleix quien asumió la responsabilidad en esta ocasión… y no perdonó.
Los de Hjulmand habían hecho los más difícil. Pero, cuando apenas quedaban cinco minutos para reajustarse en vestuarios, se pegaron un tiro en el pie abriendo la puerta a tres transiciones mortales del PSG finalizadas por Doué -por partida doble- y Kvaratskhelia para poner el 1-4 antes del descanso.
Tanto Hjulmand como Luis Enrique intervinieron dando entrada a Maza por Echeverri y Lucas Hernández por Doué… que salió ‘cara’ para un PSG que, en el 50′, hizo la ‘manita’. Vitinha rompió la presión y habilitó al espacio a un Nuno Mendes que entró ‘como cuchillo en mantequilla’.
Hjulamnd trató de detener la ‘sangría’ retirando a Kofané en lugar de Belocian. Pero, por el camino, se llevaron una alegría con el segundo tanto de un Aleix García cuyo ‘zapatazo’ a la escuadra quedó en anécdota visto el escenario.
Ideal, por cierto, para que Luis Enrique le regalase la última media hora a un Ousmane Dembélé que aprovechó un balón suelto en el área para cerrar el ‘set’ y comenzar a sacar brillo a su Balón de Oro en su partido número 100 con la camiseta del PSG. Levantaron el pie los de Luis Enrique. Pero, en el descuento, Vitinha terminó de ponerle la ‘puntilla’ al Leverkusen.
GD