por Abelardo Pérez Estrada

@abeperez

Empresario, analista político, Expresidente CANACINTRA

La semana pasada, en una clara estrategia neoliberal, la bancada de Morena y sus aliados, votaron para que se pospusiera al domingo de resurrección la discusión y posible aprobación de la “Reforma Eléctrica”, la estrategia era clara, al no tener mayoría para la reforma constitucional, la apuesta era que no asistieran diputados de la oposición, de esta forma se necesitarían menos votos para lograr la aprobación tan ansiada del presidente.

Claramente, la estrategia era buscar la aprobación, basada en mayoría por ausentismo y no en argumentos que abonen al beneficio del país, con la presión mediática diaria desde las mañaneras, calificando de “traidores” a quienes no compartan la visión de un solo hombre.

Traidor a la patria, es cometer un acto de extrema deslealtad respecto a un país, no respecto al pensamiento de su jefe de estado, de hecho, como dijo Mexicanos contra la Corrupción y la Impunidad (MCCI), “es una acusación muy grave, es el señalamiento de un delito y cuando es falso, es una calumnia inaceptable”.

Entonces, quién califica de “traidor a la patria” tendría que probarlo, de lo contrario estaría calumniando a mexicanos, simplemente por no compartir los mismos ideales, los cuales no necesariamente son a favor del país.

Volviendo al domingo 17 de abril, en un hecho que no habíamos visto en lo 3 últimos años, con una “oposición moralmente derrotada”, como calificó varias veces el presidente, lograrón hacer un frente común y así impedir la aprobación de la reforma propuesta.

Ahora, el gran reto que tiene esta oposición resucitada, es presentar una iniciativa que incluya los puntos en los que estuvieron de acuerdo con la enviada por el ejecutivo y las adiciones necesarias para modificar, actualizar y corregir los errores que tiene la actual, de lo contrario serian iguales, simplemente oponerse por oponerse, sin dar una propuesta que haga mejorar el país.

También tendrán como reto, mantenerse unidos ante las 6 elecciones que vienen en unos meses y lo mas difícil, encontrar un abanderado que, ante los ojos de los ciudadanos, nos represente más allá de lo que nos han mostrado los partidos políticos.

Políticamente, este es el segundo revés en menos de 10 días que le dan a la fuerza del presidente, uno, al tener en la revocación de mandato, una votación menor a la mitad de la obtenida en el 2018 y dos, no lograr la aprobación de la reforma eléctrica, dicen los que saben que ese será el camino a las reformas que vienen, por ejemplo, la electoral.

Para no olvidar:

1) Explicaciones pendientes de corrupción de los cercanos al presidente

2) Medicinas que caducaron en las bodegas por no ser repartidas.

3) Evaluación del manejo de la pandemia, ahora si van a vacunar hasta en los centros comerciales y no lo hicieron así desde el principio (siguen sin vacunas los mayores a 5 años)

4) Los abusos, filtrados en redes, del fiscal Gertz, que como mínimo, opacan la impartición de justicia.

5) Un largo etcétera

Insisto, ¡Es tiempo de los ciudadanos!!!, no de los traidores ni calumniadores